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En Madagascar , y en el centro y este de africa, crece la
haronga en forma de arbol o arbusto de 2 a 12 metros de altura,
destacando por la disposicion simetrica de sus grandes hojas y por
la falta frecuente de grandes porciones de la corteza. Las flores
son pequeñas y se disponen en inflorescencias umbelares en el
extremo de las ramas. |
Para su recoleccion, se arranca la corteza de los arboles y
arbustos de mayor tamaño y se la deja secar al aire. Las hojas se
cortan cuando son tiernas e igualmente se desecan al aire en un
lugar sombreado.
Hace unos 20 años que una expedicion cientifica en Madagascar
descubrio que a muchos de los arboles de esta especie que crecian
cerca de los poblados les faltaban trozos mas o menos grandes de la
corteza. Vieron en otros lugares que los indigenas masticaban de
postre trozos de plantas despues de las comidas copiosas y
especialmente grasas. Pudieron constatar que esos trozos vegetales
pertenecian a la haronga y que se masticaban porque favorecian la
digestion de los alimentos grasos. Se investigo a continuacion la
planta y se hizo el sorprendente descubrimiento de que contiene una
sustancia que estimula de modo notable la digestion, especialmente
cuando existen trastornos funcionales en el pancreas y en el higado.
Contiene haringanina (colorante fenolico de color naranja),
acido betulinico, euxanton, acido crisofanico, fiscion,
madagascina-antron, y harongina-antron (pigmentos). En las hojas
encontramos hipericina, flavonglucosidos, y fitosteroides. La planta
no se utiliza entre nosotros en forma de te. Sin embargo puede
adquirirse en farmacias un extracto de la corteza en forma de
preparado, que se denomina Harongan. Con el se trata con exito los
trastornos digestivos agudos y cronicos que van acompañados de
sensacion de plenitud, opresion en la parte superior del vientre y
flatulencia. El preparado resulta especialmente eficaz cuando estan
alterados los funcionamientos del pancreas y del sistema
hepatico-biliar y por ello no se toleran los alimentos ricos en
grasas. Junto con la corteza y los preparados obtenidos de ella, los
indigenas utilizan tambien las hojas, sobre todo para el tratamiento
de los trastornos digestivos ligeros, pero tambien para las heridas.
Los principios activos de las hojas se asemejan en cierto sentido a
los del
hiperico.
Esto no resulta sorprendente pues ambas especies estan emparentadas
botanicamente, ya que las dos pertenecen a la familia de las
gutiferas. |